LA REVOLUCIÓN CIENTÍFICA DEL SIGLO XVII
Heliocentrismo: la revolución copernicana y el modelo kepleriano-galileano 1. El realismo de la revolución copernicana Un universo sencillo, armónico y unificado La nueva cosmovisión científica se inicia con una verdadera revolución: la Tierra deja de ser el centro del universo, y el Sol viene a ocupar ese lugar. Este fue el hallazgo de Copérnico. Para él, la rotación de la Tierra sobre su eje y la traslación anual en torno al Sol eran hechos físicos, no artificios matemáticos. Por lo demás, todo astrónomo podía notar que las constantes de epiciclos y deferentes usadas por Ptolomeo para Mercurio y Venus estaban invertidas con respecto a las de los demás planetas: prueba de que estos estaban más cerca del Sol que de la Tierra. Había otras razones para el cambio de centro: Copérnico necesitaba solo 34 círculos, frente a los 80 ptolemaicos. Epiciclos y deferentes seguían siendo usados, pero se evitaba el «escándalo» de los ecuantes, haciendo que las órbitas en torno al